Vehículos de empresa con uso mixto: claves fiscales para no tener problemas con Hacienda

¿Tienes un vehículo mixto adaptable? Cuando se trata de Hacienda, este tipo de uso mixto implica ciertas obligaciones fiscales que no hay que pasar por alto. ¿Se puede deducir el IVA? ¿Qué requisitos hay que cumplir para justificar el uso profesional? ¿Cómo evitar sanciones por parte de la Agencia Tributaria? Quédate que te lo contamos todo.

Aunque «vehículo mixto adaptable» y «vehículo de uso mixto» puedan parecer lo mismo, lo cierto es que se trata de dos conceptos bien diferenciados. Si eres autónomo o tienes una pequeña empresa, te interesará cuáles son las diferencias legales y funcionales de ambos. 

Definición legal y caracerísticas

Los vehículos mixtos adaptables son aquellos con capacidad para transportar personas y mercancías, ya sea de manera simultánea o no. Están diseñados para que el usuario pueda modificar el interior fácilmente dependiendo de cuál sea la función que necesite en cada momento. Por ejemplo, añadiendo o retirando los asientos. ¿Qué características debe cumplir para ser considerado VMA?

• Altura de 1,80 m o superior
• Debe estar sujeto a una actividad económica, al menos al 50 %
• Estar clasificado como tal en la ficha técnica del vehículo
   

En cambio, un coche mixto es más genérico. Puede referirse a vehículos destinados principalmente al trabajo, pero que también pueden usarse con fines privados. Suelen tener una orientación más profesional y no siempre ofrecen la versatilidad interior de un mixto adaptable. Además, un VMA también puede ser de uso mixto.

Cómo se trata el uso mixto a efectos del IVA y del IRPF

Los VMA generan ciertas dudas en materia fiscal, especialmente cuando se utilizan tanto para fines profesionales como personales. En este contexto, es importante saber cómo trata la Agencia Tributaria el uso mixto a efectos del IVA y el IRPF, y qué criterios hay que cumplir para poder desgravar.

Por qué Hacienda limita la deducción al 50% del IVA

La normativa establece que, salvo prueba en contrario, los vehículos utilizados por autónomos y empresas para actividades económicas solo pueden deducirse el 50 % del IVA soportado en su adquisición o alquiler. Esta presunción se basa en la idea de que un coche o furgoneta de uso mixto suele tener también un componente privado difícil de separar del profesional.

Cuándo puede aceptarse una deducción mayor

Sin embargo, es posible deducirse hasta el 100 % del IVA si se demuestra que el uso es exclusivamente profesional. Esto se aplica a vehículos destinados al transporte de mercancías, mensajería, autoescuelas, taxis o vigilancia, entre otros. También se permite si el vehículo está rotulado, tiene mampara y se limita su uso fuera del horario laboral.

Criterios fiscales para justificar el uso profesional

Para defender una deducción superior al 50 %, Hacienda te exigirá pruebas sólidas y objetivas como las siguientes:

• Registros de kilometraje
• Rutas de trabajo
• Facturas
• Contratos
• Contrato de renting con cláusulas específicas
• Fotografías del vehículo en contexto profesional
   

Ten claro que, cuando más documentado esté el uso laboral del vehículo, más fácil será justificar una deducción completa.

Documentación que debes conservar para evitar sanciones

¿Tu vehículo es de uso mixto (profesional y personal)? Entonces, conservar una buena documentación te servirá para justificar las deducciones fiscales y evitar sanciones por parte de Hacienda. La carga de la prueba recae sobre el contribuyente, por lo que conviene estar preparado con evidencias claras que respalden el uso profesional del vehículo.

Facturas, contratos y registros de actividades del vehículo

Las facturas de compra o leasing, contratos de renting, seguros y cualquier documento relacionado con el vehículo deben conservarse durante el periodo legal de prescripción. Además, es recomendable llevar un registro de los desplazamientos realizados por motivos laborales, incluyendo fechas, destinos y kilometraje. En el caso de autónomos, un control del libro de ingresos y gastos vinculado al vehículo puede reforzar la coherencia de los datos.

Cómo demostrar que el uso personal es residual

Para justificar que el uso particular del vehículo es marginal, puedes aportar:

• Fotografías del vehículo rotulado
• Accesorios que limiten su uso personal (como una mampara)
• Contratos que especifiquen el horario y finalidad del uso
• GPS o apps de seguimiento que documenten las rutas profesionales
• Guardar el vehículo en un garaje de empresa fuera del horario laboral
   

Lo importante aquí está en tener una trazabilidad clara del uso del vehículo. Cuanta más documentación objetiva presentes, menor será el riesgo de que Hacienda rechace tus deducciones o imponga sanciones.

Errores comunes que llevan a sanciones en inspecciones

Ya sabes que Hacienda siempre está al acecho y, en cualquier momento, puede realizar una inspección sobre el uso de tu VMA. Algunos errores frecuentes por parte del contribuyente pueden derivar en sanciones económicas importantes. Identificarlos a tiempo es clave para evitarlos y actuar con mayor seguridad fiscal.

Falta de justificación clara del uso mixto

El principal error es no justificar adecuadamente la proporción de uso profesional y personal del vehículo. Muchos contribuyentes aplican deducciones sin aportar registros, agendas, partes de trabajo o cualquier otra prueba que acredite el uso empresarial. Esto debilita tus argumentos ante una inspección y puede llevar a que Hacienda deniegue la deducción aplicada.

Confusión entre titularidad personal y empresarial

Otro punto importante es que el VMA debe estar a nombre del autónomo o de la empresa en cuestión. Aparte de que te ofrecerá ventajas fiscales, la falta de una separación clara entre patrimonio personal y profesional complica la defensa fiscal. 

Deducción íntegra sin respaldo documental

Deducir el 100 % del IVA sin pruebas contundentes del uso exclusivo profesional es un riesgo elevado. Hacienda, por norma general, solo permite deducir el 50 % del IVA salvo que se demuestre que no existe uso particular. Sin documentación detallada, este tipo de deducción suele ser rechazada y conlleva regularizaciones y sanciones.

Hasta aquí nuestro repaso al tema del vehículo mixto adaptable y sus implicaciones fiscales. No obstante, aparte de estos, existen otros vehículos dedicados a actividades laborales que no te puedes perder, como los VTC: Qué son, cómo obtener una licencia y oportunidades en el sector.