Sistemas de retención infantil: tipos y cuándo caducan

Sistemas de retención infantil: ¿por qué son tan importantes?

Las sillas de coche para los más pequeños de la casa son una medida imprescindible para garantizar su seguridad tanto en los desplazamientos cortos como en los viajes. Es por ese motivo que, en el momento de adquirir uno de los sistemas de retención infantil disponibles, resulta primordial buscar calidad y las máximas prestaciones de seguridad.

Debido a la importancia de estos asientos, es habitual que la misma sillita vaya cambiando de manos. Muchas veces, estos sistemas se adquieren de segunda mano o son reutilizados por distintos miembros de una misma familia. Sin embargo, ¿hasta qué punto es seguro usar un sistema de retención infantil durante tanto tiempo?

Tipos de sistemas de retención infantil y caducidad

Las sillas de coche que se adquieren en los países de la Unión Europea no llevan indicada una fecha de caducidad; sin embargo, eso no significa que su vida útil sea ilimitada. En otros países -como por ejemplo, Estados Unidos- muchas sillas indican la fecha de uso recomendado. Aun así, existe un tiempo límite orientativo que puedes tener en cuenta para guiarte a la hora de sustituir tu sistema de retención infantil. El tiempo de uso que podrás considerar seguro para que el dispositivo resulte eficaz también dependerá del tipo de silla que hayas adquirido.

Principalmente, distinguimos entre dos tipos de silla:

• Los sistemas de retención infantil con la homologación ECE R44/04 (SRI). Es la utilizada por los fabricantes hasta el 31 de diciembre de 2017. Su tiempo estimado de duración es de 7 años.
• Los sistemas de retención infantil con la homologación ECE R129. Es empleada por los fabricantes desde el 1 de enero de 2018 y, en este caso, su fecha de caducidad estimada se prolonga hasta los 10 años.

Otras consideraciones a tener en cuenta

Es importante que, a la hora de estimar el tiempo de uso seguro de los sistemas de retención infantil, consultes la fecha de fabricación de la silla. Ésta fecha es la que debes tomar como punto de partida, y no la fecha de adquisición del dispositivo. En general, si quieres disfrutar de una silla que te dure más años, es importante adquirir sistemas fabricados con materiales que tengan en cuenta la degradación de los materiales.

Otros parámetros que puedes tener en cuenta a la hora de sustituir la silla son:

• Si falta algún material o parte de la silla debido al uso, ya que podría perder eficacia.
• Si notas que el arnés está desgastado, en cuyo caso podría afectar a la seguridad.
• Si la silla ha sufrido algún tipo de impacto, incluso aunque haya sido en un choque leve, puede impactar en el posicionamiento de la silla.
• Si la silla es de segunda mano y desconoces en qué condiciones se ha utilizado o falta información clave (etiqueta de homologación, manual de instrucciones, piezas incluidas, etc.).

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Disponer de una sillita para niños segura marca la diferencia, de la misma manera que también marca la diferencia sentir que los tuyos están seguros en todos los desplazamientos que realizas en tu vehículo. Por ese motivo, si quieres estar tranquilo, el mejor consejo es optar siempre por la mejor calidad tanto en los dispositivos como en los servicios que contratas para tu automóvil.

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