
- Línea Directa
- Blog
- Salud
- Seguro de salud privado: coberturas básicas y mitos
Seguro de salud privado: ¿qué cubre realmente una póliza básica?

Si nos solicitas que te llamemos tus datos serán tratados por LINEA DIRECTA ASEGURADORA, para ponernos en contacto contigo con la finalidad de gestionar tu petición de seguros. Puedes consultar más información aquí donde se informa, entre otros aspectos, de cómo ejercitar los derechos de acceso, rectificación, supresión, limitación, oposición o portabilidad de datos.
Qué es un seguro de salud privado
Rapidez, confort y coberturas adicionales son algunas de las razones por las que cada vez más personas desean contratar un seguro médico privado. Si aún no te animas a dar el paso, deberías quedarte con nosotros hasta el final. Te ayudaremos a resolver todas tus dudas para que puedas tomar la mejor decisión.
Es un contrato entre el tomador y una compañía aseguradora que ofrece acceso a servicios médicos a cambio de una prima periódica. El principal objetivo de los seguros privados de salud es facilitar al asegurado una atención rápida, flexible y personalizada.
Diferencias con la sanidad pública
La sanidad pública se financia mediante impuestos y garantiza el acceso universal a la atención médica, sin importar la situación económica del paciente. Lo malo de este sistema es que suele presentar listas de espera más largas y menor capacidad de elección en cuanto a médicos o centros hospitalarios.
En contraposición, un seguro privado funciona por contratación individual. Por esto, tiene facilidades como estas que te explicamos.
- El usuario puede decidir dónde y con quién atenderse.
- Las citas son más rápidas.
- La atención es más directa.
Ventajas más destacadas
¿Sabes qué beneficios te aporta contratar un seguro de salud privado? Te los enumeramos:
- Inmediatez a la hora de acceder a pruebas y consultas.
- Acceso a pruebas diagnósticas avanzadas.
- Elección de centros médicos y profesionales.
- Cobertura de servicios no incluidos en la Sanidad Pública.
- Mayor comodidad durante las hospitalizaciones.
- Atención personalizada.
- Desgravación en la declaración de la renta.
Coberturas habituales de una póliza básica
Cada seguro privado es un mundo. No obstante, una póliza básica garantiza que tus necesidades médicas más comunes estén cubiertas. Aquí te explicamos lo que incluye. ¡Toma nota!
Consultas con especialistas
Podrás ir directo a consultas con especialistas como dermatólogos, ginecólogos, cardiólogos, traumatólogos, etc. Al no tener que pasar primero por el médico de cabecera, se agiliza la detección y el tratamiento de los problemas de salud específicos.
Pruebas diagnósticas
Las pruebas de diagnóstico forman parte de las pólizas básicas. Es el caso de estas.
- Análisis de sangre
- Radiografías
- Ecografías
- Resonancias
La rapidez en los plazos se traduce en detecciones precoces y tratamientos más efectivos.
Hospitalización y urgencias
Tendrás acceso a hospitalización. Tanto en el régimen de ingreso como cuando sean intervenciones quirúrgicas programadas. Los hospitales y clínicas privadas ofrecen mayor comodidad, mejor alimentación y, en general, un entorno más confortable en estas situaciones.
El seguro contempla, también, la atención en urgencias. Como no sabemos cuándo nos pondremos malos, esta cobertura te proporciona una respuesta inmediata ante los imprevistos de salud.

Mitos frecuentes sobre los seguros privados
El desconocimiento y la desinformación nos juegan malas pasadas y en este ámbito ocurre lo mismo. Hay muchas ideas equivocadas que giran en torno a los seguros de salud. ¿Preparado para que las desmintamos?
Creencia de cobertura total
¿Un seguro médico privado lo cubre todo? No. En realidad, cada póliza establece condiciones, exclusiones y límites que varían según la aseguradora.
Por ejemplo, algunos tratamientos muy específicos pueden no estar incluidos, al igual que contar con ciertas patologías preexistentes. Para evitar cualquier tipo de sorpresa, hay que leer detenidamente el contrato.
Confusión con pólizas premium
¿Todas las pólizas son iguales? Muy falso. Quizás pienses que cualquier seguro privado te ofrece acceso ilimitado a todas las especialidades, pruebas y tratamientos sin coste adicional. Sin embargo, estas prestaciones suelen estar ligadas a planes más completos. Y, por ende, con una prima más elevada. Entender estas diferencias te permite ajustar la elección del seguro a tus necesidades y presupuesto reales.
Qué no suele cubrir una póliza básica
No hay duda de lo útiles y beneficiosos que pueden llegar a ser los seguros de salud. No obstante, para poder sacarles todo el partido, debes tener claro qué aspectos suelen quedar fuera en una póliza básica. Evitarás malentendidos y podrás decidir.
Tratamientos muy específicos
Los tratamientos altamente especializados no forman parte de las pólizas básicas. Aquí entrarían cosas como ciertas terapias genéticas, técnicas de reproducción asistida, cirugías estéticas sin justificación médica, procedimientos experimentales…
También es habitual que se limiten las sesiones de fisioterapia o psicología a un número máximo al año. Así que, si necesitas un tratamiento más prolongado, tendrás que asumir un coste adicional.
Medicación fuera del hospital
La póliza cubre, normalmente, la medicación administrada durante una hospitalización, pero no los fármacos que el paciente deba adquirir en farmacia para continuar su tratamiento en casa. Esto significa que gran parte del gasto farmacéutico recae directamente en el asegurado.
Consejos antes de contratar
Contratar un seguro de salud privado es una decisión importante. Hay que tomárselo con calma y disponiendo de toda la información que sea posible.
Ya has visto que no todas las pólizas son iguales. Además, hay que sumar las diferencias que existen entre las diferentes aseguradoras. Todos estos factores marcan la experiencia del asegurado, tanto a medio como a largo plazo.
Revisar exclusiones
Uno de los errores habituales es fijarse solo en las coberturas incluidas y pasar por alto las exclusiones. Que no te pase a ti. Lee con detalle cuáles son esas cosas que no están cubiertas. Por ejemplo:
- Enfermedades preexistentes
- Tratamientos especializados
- Medicación
- Ciertos servicios
Ten mucho ojo también con los periodos de carencia. En muchas pólizas hay que esperar unos meses antes de acceder a ciertos servicios, como hospitalizaciones o partos. Recuerda que puedes ponerte en contacto con la aseguradora para aclarar todos estos aspectos.
Comparar varias aseguradoras
No todas las compañías ofrecen las mismas condiciones… ¡ni los mismos precios! De ahí que te convenga tanto solicitar información en varias aseguradoras. Recabar esos datos te servirá para comparar a fondo:
- Tarifas
- Cuadro médico
- Servicios
- Exclusiones
- Reputación
- Opiniones de otros usuarios
Ya sabes, una comparación objetiva es clave para dar con un seguro que aúne calidad, prestaciones y coste.
¿Te animas a contratar un seguro médico privado? Ten fijo que es una muy buena alternativa a la sanidad pública. Eso sí, siempre que elijas la póliza adecuada. Y, con los estupendos consejos que te hemos dado, no te será complicado. ¡Apuesta por tu bienestar!
Otros artículos sobre Seguros de Salud
En nuestro blog podrás encontrar más información acerca de los Seguros de Salud gracias a nuestros artículos
Relación entre sueño y sistema inmune
Por qué algunos síntomas leves son peligrosos
Por qué algunos síntomas leves son peligrosos