Sistema MIPS en los cascos: ¿Solo una moda o mayor seguridad?

El sistema MIPS se utiliza en los cascos de ciclismo con el objetivo de incrementar la seguridad. Pero ¿es realmente cierto? Te lo contamos en este artículo. 

El sistema MIPS es una tecnología que se ha desarrollado en la última década y que se incorporó en los cascos de ciclismo de diversos fabricantes. Sus siglas se corresponden con Multi-Directional Impact Protection System, y viene a significar que es un sistema de protección para los impactos en diferentes direcciones. 

Sin embargo, su función no es exactamente la que parece transmitir. En su interior, estos cascos llevan incorporada una lámina de policarbonato que tiene el objetivo de convertir el impacto frontal cuando hay una caída de la bicicleta en rotatorio. En cuanto a la anatomía, es una estructura interna que evita que la cabeza entre en contacto directo con la carcasa del casco. 

Pero como decíamos, por su nombre puede parecer que el sistema es una protección ante impactos que vengan en cualquier dirección. Cuando en realidad, hace referencia a la transformación del golpe directo en un movimiento. 

¿Qué hace el MIPS y cómo funciona?

Hemos dicho que el sistema MIPS es una fina lámina de policarbonato que se ajusta en la cabeza. Esta se ajusta a la parte interna del casco, es un poliestireno expandido y se asemeja al corcho. Para ello, hace uso de unas gomas y pines que van conectando las dos partes. 

Al colocar el casco en la cabeza con este sistema incorporado, la carcasa se puede mover y girar, pero la lámina interior de MIPS permanece fija sobre el cráneo. Si se produjera un impacto lateral, el casco tendría la posibilidad de girarse un par de centímetros. De este modo, toda la fuerza del impacto se transforma en energía rotatoria y, por consiguiente, no va directa al cráneo y al cerebro. Las cifras indican que la reducción de dicho impacto se produce en un 39%, aproximadamente. 

¿Quién inventó el sistema MIPS? Evolución de los cascos hasta hoy

Hace un par de décadas, el uso de los cascos para circular en bicicleta ni siquiera era obligatorio, por lo tanto, todas las tecnologías que se han ido desarrollando en la última década son muy nuevas y no se tiene tanta experiencia o conocimientos como puede suceder con los cascos que se usan para las motocicletas. 

Dado que en una bicicleta el esfuerzo lo realiza enteramente la persona, el casco tenía como principal inconveniente el calor que su uso implicaba. Si bien ahora dispones de ventilación, hay que tener en cuenta que, en sus inicios, estaban elaborados con una plancha de policarbonato, que es un plástico, y no disponían de ventilación. Es decir, que el sudor se acumulaba y no había forma de hacer que se evaporase. 

El desarrollo del sistema MIPS se produce en 1996 por un neurocirujano sueco, Hans van Holst.  Este se dedicó a evaluar el modelo de protección que usaban los cascos en aquella época junto con la OMS, y se llegó a la conclusión de que, si bien el casco protegía el cráneo, un impacto tenía el potencial suficiente para causar daños en el cerebro. 

A partir de ahí, y junto a Peter Halldin, un investigador del Instituto Real de Tecnología de Suecia, comenzaron a desarrollar lo que hoy es la tecnología MIPS, más conocida como impactos rotacionales. 

En los últimos años, también han tenido lugar otros avances. En 2018, en la presentación del Giro Aether, el sistema pasó a contar con dos bloques de corcho en poliestireno, en lugar de policarbonato, y donde uno de ellos se mueve en el interior del otro. Su peso no supera en ningún caso los 45 gramos. 

Además, el propio proceso de fabricación ha sufrido cambios. En lugar de ser universal para todos los modelos de una marca, la implantación se realiza en cada modelo y en cada casco, de manera que se pueda dar con la forma idónea de sujetarlo al corcho para obtener la mejor ventilación y protección. 

¿Qué marcas apuestan por la tecnología MIPS?

Además de Giro, que fue la responsable de que se invirtieran multitud de recursos para el desarrollo del sistema MIPS porque confió plenamente en la incorporación de esta tecnología a sus cascos, también hay otras que han seguido el mismo camino. Por ejemplo, Smith Optics, POC, Scott Sports, Lazer, Oakley o Trek. 

Aunque todas incorporan la misma base de la tecnología, cada una ha sabido seguir su propio camino y adaptan este sistema al diseño personal de sus cascos, pero también a la estética de manera que haya un equilibrio entre innovación y estilo, dos características que siempre se tienen en cuenta a la hora de elegir cascos. 

Ventajas del sistema MIPS

Hemos visto el funcionamiento de este sistema a través de su evolución, pero como resumen, estas son las principales ventajas que se consiguen cuando se incorpora esta tecnología en los cascos de ciclismo. 

• Reducción de las fuerzas rotacionales. El sistema MIPS está diseñado para disminuir las fuerzas rotacionales transmitidas al cerebro en caso de impacto oblicuo. Una característica muy importante en los accidentes, puesto que múltiples lesiones cerebrales traumáticas se producen debido a la rotación del cerebro dentro del cráneo.
• Mejora de la protección. Este movimiento relativo entre la cabeza y el casco ayuda a disipar la energía rotacional generada por el impacto. De nuevo, es una forma de reducir el riesgo de lesiones cerebrales graves.
• Adaptabilidad. Con su evolución, este sistema es eficaz en diferentes situaciones y tipos de impacto durante los accidentes, así que su versatilidad se ha incrementado.
• Respaldado por la investigación. Su propio desarrollo ha sido el resultado de la investigación, y por eso, incorpora protecciones que dan una mayor seguridad que los cascos tradicionales.

La seguridad debe ser siempre la prioridad cuando se circula por carreteras. Si quieres la máxima protección cuando circulas en bicicleta o en patinete contrata un Seguro de Movilidad Personal, consulta las coberturas de Línea Directa.