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La subida de los precios del combustible se ha disparado y ahorrar gasolina se ha vuelto una necesidad. Según la Agencia Internacional de Energía, con una conducción eficiente se puede reducir hasta un 12 % el consumo del carburante.
Consejos para una conducción eficiente
En Línea Directa te mostramos 9 trucos para ahorrar gasolina mediante la conducción eficiente.
1. Vigila la presión de los neumáticos
Un factor muy importante a tener en cuenta es que la presión de los neumáticos siempre debe ser la indicada por el fabricante. Si esta es inferior a la debida, el consumo puede aumentar un 2 % en áreas urbanas y 4 % en áreas interurbanas.
Cambiar los neumáticos o arreglarlos puede llegar a ser bastante costoso, por lo que un seguro de neumáticos puede ser una buena opción para asegurarse de que siempre están en el mejor estado posible: lo agradecerá el bolsillo y también es lo ideal para la seguridad.
2. Mantén una velocidad uniforme
¿Sabías que el 43 % de los conductores incumple habitualmente los límites de velocidad? Esta conducta, además de peligrosa, supone un gran derroche de gasolina.
Los cambios de velocidad aumentan el consumo de combustible, por lo que se debe mantener una velocidad constante. Es recomendable conducir a 10 km/h por debajo de la velocidad de la vía para ahorrar más combustible: por ejemplo, conducir a 110 km/h en autopistas nos ayuda a ahorrar un 11 % de carburante.
3. Utiliza marchas largas
En la fase de aceleración siempre se debe subir cuanto antes a las marchas largas. No es necesario esperar a que el vehículo se encuentre a unas 3000 o 3500 rpm para pasar de una marcha a otra, pues si no cambiamos de marcha, se crea un exceso de revoluciones y se consumirá más carburante. En la gran mayoría de coches, cuando el motor va en cuarta, quinta y sexta, gasta menos.
4. Evita frenar y acelerar bruscamente
Para lograr una conducción eficiente es importante conducir con suavidad, de manera fluida y anticipándonos al tipo de trazado para evitar cambios de ritmos bruscos, frenazos y acelerones. Esta práctica puede llegar a ahorrarnos hasta un 20 % de combustible según nuestro tipo de vehículo, por eso es una buena idea consultar algunas recomendaciones para conducir por carreteras secundarias, por ejemplo, antes de salir de viaje.
5. Usa el freno motor
Deja que el freno motor detenga el vehículo. Para ello quita el pie del acelerador suavemente, sin pisar el pedal de freno. De esta forma, el coche se irá frenando de forma progresiva hasta detenerse por completo y sin depender del suministro del combustible, lo que reducirá el consumo.
6. No abuses del aire acondicionado
Tanto el aire acondicionado como la calefacción gastan mucho carburante, generalmente entre un 4 % y un 10 %. Abrir las ventanillas también aumenta el gasto de gasolina, ya que el aire que entra con fuerza al interior del vehículo crea un efecto de freno aerodinámico y hace que el motor tenga que trabajar más para seguir con el ritmo. Lo recomendable es bajar las ventanillas en vías urbanas y usar el aire acondicionado en carretera, especialmente cuando la velocidad es superior a los 80 km/h.
7. Apaga el motor en las paradas largas
Es conveniente apagar el vehículo durante paradas prolongadas, para evitar que el motor se sobrecaliente y aumente el gasto de gasolina. De hecho, un motor gasta más estando al ralentí que arrancándolo y apagándolo, por ello cada vez son más los coches que cuentan con la función Start&Stop, un sistema que lo apaga automáticamente al detenerse.
8. Distribuye bien la carga
Antes de iniciar el viaje, racionaliza el peso y el reparto de la carga, especialmente si se trata de largos recorridos, pues conducir 100 kg de peso extra disparará el consumo de carburante un 6 % . Además, si utilizas el coche diariamente, no uses el maletero como trastero: reducir el peso es una forma fácil de ahorrar combustible también en el día a día.
9. Planifica bien tu viaje
Planificar el trayecto te ayudará a llegar a tu destino de la manera más fácil y rápida. Evitarás encontrarte con posibles imprevistos, como retenciones, condiciones meteorológicas adversas o perderte por caminos desconocidos que te quiten mucho tiempo, lo cual se traduce en un mayor tiempo de viaje y, por tanto, un mayor gasto de combustible.
Y si no nos crees, un dato: alargar 10 minutos más un viaje de una hora puede aumentar el consumo de gasolina hasta un 14 %.
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