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Un viaje en moto es una opción si buscas una experiencia diferente y obtener sensaciones distintas.
Aprovechar el buen tiempo para conocer nuevos lugares en moto, puede ser un plan muy atractivo. Recorrer paisajes extraordinarios por la costa o entre cadenas montañosas sobre dos ruedas es una forma de viajar que quien lo prueba, repite.
Eso sí, te avisamos que esta aventura tiene algunas peculiaridades, por lo que no está de más tener en cuenta algunas recomendaciones antes de iniciarla.
Antes de salir, revisa la moto
Evita imprevistos que puedan truncar tu viaje por avería, es posible si realizas una revisión de los componentes principales de la moto: frenos, amortiguadores, filtro, nivel de los líquidos, presión de las ruedas.
Es recomendable que sea un taller el que haga una revisión exhaustiva que nos asegure que no hay ningún elemento deteriorado que se nos pueda romper en el transcurso de la aventura.
Si se trata de una escapada larga, controla el nivel de aceite del motor, por si fuera necesario reponer durante la misma.
No obstante, en caso de incidente, si cuentas con asistencia en viaje para tu moto en el seguro, se
Ropa cómoda, ¡pero segura!
Una vez preparada la moto, toca equipar a los pasajeros, aunque sea verano y haga calor, se ha de ir bien protegido.
Hoy día el mercado pone a nuestra disposición ropa fabricada con tejidos especiales que permite sobrellevar mejor las altas temperaturas. Opta por un traje con protecciones, casco y guantes ventilados así como unas botas de verano, son más ligeras.
Los cascos integrales o abatibles, además de ser más seguros, son más silenciosos. Para mejorar la visibilidad puedes llevar 2 viseras: una con filtro solar homologada que evite deslumbramientos, así como recalentamientos del interior; y otra transparente para utilizar cuando haya poca luz o por la noche. Incluye también unas gafas polarizadas.
No olvides llevar alguna prenda impermeable para ir preparado en caso de lluvia.
Organiza el equipaje
A la hora de organizar el equipaje, los siguientes factores serán determinantes:
- Capacidad que tiene tu modelo moto.
- Distancia y duración del trayecto.
- Si viajan 1 o 2 personas.
Reduce al máximo tus necesidades, pero si aun así, necesitaras espacio extra, puedes envasar al vacío la ropa en bolsas para compactarla. De este modo si llueve, aunque las maletas sean impermeables, evitarás que se mojen tus pertenencias.
Es fundamental repartir bien peso entre todos los cofres o maletas y poner lo más pesado en el centro y sobre el depósito, no en los laterales. No la sobrecargues, una moto pesada es mucho más difícil de controlar.
Con el movimiento de la moto, las maletas tienden a moverse, así es que átalas bien para que no se desplacen y acaben dañadas al entrar en contacto con el tubo de escape. Una red elástica será de ayuda para reforzar la sujeción.
Por último, no olvides incluir como parte del equipaje, un kit de reparaciones de emergencia, te sacarán de algún que otro apuro durante las vacaciones.
Documentación
Además del seguro, permiso de conducir y DNI, ten en cuenta que si viajas al extranjero, puedes necesitar:
- En algunos países, la carta verde, que tu seguro emitirá en el momento que la solicites.
- Listado de talleres oficiales de la marca de tu moto en el país de destino.
Ten en cuenta el desgaste físico
Ponte en forma
Entrena los meses anteriores al viaje realizando salidas semanales de al menos dos horas de duración, de este modo el cuerpo se irá adaptando a periodos extensos sobre la moto.
Si quieres evitar tener dolores musculares, estirar al principio y al final del trayecto, te ayudará.
Ya en camino
El mejor momento para viajar en verano es cuando el sol ya declina: a primera hora del día y al atardecer. Además de disfrutar de una luz más especial, evitamos el calor ambiental extremo, y más, teniendo en cuenta que la propia moto también desprende el suyo propio.
La DGT recomienda hacer descansos cada 2 horas o 200 kilómetros, además de haber dormido lo suficiente en las horas previas al viaje.
Con altas temperaturas es aún más importante viajar bien hidratado, así es que, aprovecha las paradas de descanso para reponer líquidos y evitarás posibles calambres musculares.
¡Buen viaje y a disfrutar!
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